Un día completo en la histórica capital de Irlanda del Norte que terminaremos con un paseo por el Parque Forestal Glenariff, de camino a la imprescindible Calzada de los Gigantes.
Itinerario >> Día 4 de nuestra senda por Irlanda.
- Salida desde Dundalk donde habíamos pasado la noche en un hotel de las afueras tras realizar The Wicklow Way.
- Paseo por los alrededores de la Divis y la Black Mountain en Belfast.
- Belfast.
- Paseo por el Bosque de Glenariff.
- Noche en Finn McCool’s Hostel, junto a la Calzada de los Gigantes.
Nuestra Senda.
Salimos de Dundalk donde pasamos la noche en un buen hotel de las afueras, gracias a una oferta que había encontrado. Necesitábamos un buen descanso tras los días recorriendo The Wicklow Way. Hoy las horas de sol que nos habían acompañado días atrás parecen que no serán tales y el tiempo ya empieza a ser más irlandés, es decir, a estar «revuelto».

Había investigado bastantes rutas de senderismo de camino a Belfast, pero por tiempo, decidí dirigirnos directamente a hacer alguno de los paseos que junto a la Black Mountain y la Divis Mountain, permiten ver Belfast desde las alturas. Pero al llegar, el clima se pone muy difícil en lo alto de la colina y decidimos hacer solo el paseo de Lough Trail y volver al coche para bajar a la ciudad.
Primero paramos en los famosos murales con motivos políticos en la conjunción de la calle Falls Road y Northumberland St. El turismo en Belfast está siendo muy potenciando por la atracción estrella: Titanic Experience (el Titanic fue construido entre 1909 y 1912 en el astillero Harland and Wolff de Belfast). Yo de todos modos, de esta ciudad me quedo con sus calles impregnadas de historia y la multitud de grafitis con mucho estilo que nos vamos encontrando al doblar cada esquina.

Para visitar la ciudad, dejamos el coche en el aparcamiento de la Titanic Experience y dedicamos algo más de dos horas a visitar el complejo… Encontramos mucha información sobre la historia de los astilleros y la ciudad desde el siglo XlX. Instalaciones audiovisuales muy modernas. Buenas reproducciones de las habitaciones de primera, segunda y tercera clase… En definitiva, imprescindible para los amantes de la historia del Titanic y buena visita familiar, aunque tanta publicidad hace que te esperes aún más. Al fin y al cabo no deja de ser un museo muy moderno con algunas actividades interactivas durante el recorrido.

Caminando llegamos al centro de la ciudad y paseamos entre la Catedral y el Ayuntamiento. En este último entramos en el recibidor para ver la cúpula que domina el edificio. Cerca de la catedral hay calles estrechas con varios pubs y murales con imágenes de actores famosos y otros personajes.
Tras comer algo, y dar un último paseo, recogemos el coche y dejamos atrás Belfast. Tenemos que dormir en un albergue junto a la Calzada de los Gigantes, pero aún tenemos tiempo de hacer una parada más de camino: el bosque de Glenariff. Este bonito lugar es perfecto para un natural paseo de entre una y dos horas. Especialmente interesante es el waterfall trail.
Todos los caminos están perfectamente indicados y la mayoría se pueden hacer de forma circular. Según el tiempo que tengáis, podéis dejaros llevar por el bosque o directamente dirigirnos a la senda encerrada por pasarelas, desde donde se pueden contemplar bonitos saltos de agua. Yo dí un paseo de aproximadamente una hora que podéis ver es este track.
Se acaba el día y nos dirigimos al albergue, pero esta vez lo hacemos tomando la carretera de la costa o lo que es lo mismo, la Causeway Coast. Estos paisajes ya empiezan a ser lo que esperamos de Irlanda del Norte y nos sirven de aperitivo de lo que nos espera mañana.
Galería.
